historia
Diario abierto de nuestro fundador. Fundador de Los Muebles de La Granja
Durante mi juventud pasé por muy diversos oficios que iban desde el canto a la vida hasta en el campo encargándome de ganado, pasando por el cuidado de la huerta, las artes plásticas, elaborando paisajes para dioramas militares… y varios intentos de vivir del aire.
Tenía un trabajo en Segovia que me permitía el sustento mensual. No tenía ni idea de a qué dedicarme…pero si sabía que podía hacer cosas con las manos y hacerlas bien. Así que en 1979-1980 encontré un oficio, paralelo a mi trabajo en Segovia, que y comencé a hacer pequeñas reparaciones de muebles a familiares, así como otros pequeños encargos para conocidos. Todo ello transcurría en un pequeño garaje que me dejó mi padre en La Granja. Día a día los ingresos de estas reparaciones iban superando a los que tenía en el trabajo de Segovia. Así que en el año 1983, de vuelta de viaje de novios y apoyado por mi mujer, decidí dejar la empresa en la que tenía un contrato seguro y un puesto de cierta responsabilidad, para dedicarme en cuerpo y alma al mundo de la madera y la decoración.
Una cosa lleva a otra y mientras hacía trabajos de encargo, empecé a diseñar algún tipo de muebles siempre bajo la influencia de los ambientes en los que había vivido, empecé a ser más empresa que taller artesano, y poco a poco nos fuimos haciendo más grandes. Durante los 10 años siguientes fue la época de la asistencia a las ferias profesionales y a la creación continua de modelos dentro de líneas clásicas. Y de estar involucrado Muebles en Segoviapersonalmente en todas las áreas del negocio, tanto creativas como administrativas.
Sobre el año 2000 la importación de productos, primero mejicanos y después asiáticos, fue disminuyendo la capacidad de competir por lo que la salida que quedaba era volver a los principios de trabajos a la medida y al mundo de la construcción y la reforma.
Recientemente, decidí intentar otra fórmula de trabajo: fabricar los productos que considero son la demanda actual, con ideas nuevas, más colorido, más optimismo en la creación, muebles más innovadores, decoración más atrevida. De este modo también voy dejando el negocio más en la mano de las nuevas generaciones dentro de la empresa.
A raíz de este nuevo giro en nuestro negocio, apostando por un futuro y siendo flexibles para captar la esencia de los tiempos, he dado el paso acertado en la selección de colaboradores y veo que los resultados van siendo mucho mejores. Toda esta ilusión espero poder verla reflejada en la realidad, y que transmitiendo nuestro entusiasmo vosotros, nuestros clientes, refrendéis con la adquisición de estás elaboradas y cuidadas nuevas líneas de mobiliario.

Luis Comyn Gómez-Acebo

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